La reciente perforación al alza de resistencias no nos inspira por el momento la necesaria confianza…

Es verdad que es normal que el mercado se muestre prudente en vísperas del resultado de la reunión de la Reserva Federal que termina mañana, pero la manera en que se ha producido la perforación al alza de los máximos históricos de la bolsa estadounidense no nos inspira por el momento la necesaria confianza: ha sido hasta ahora una ruptura al alza con escasa convicción, con poco recorrido, y sin que a nivel de valores puedan identificarse aún motores claros con capacidad para liderar la subida. Así las cosas, de momento no nos creemos esta perforación al alza. De momento, porque también es verdad que la dinámica de mercado puede cambiar muy rápidamente tanto en un sentido como en otro. Ya sabemos que el mercado da por hecho que la Fed aprobará mañana un nuevo recorte de su tipo de interés de referencia. En nuestra opinión, la situación de la economía estadounidense no presiona en estos momentos en favor de una nueva relajación de la política monetaria, más aún cuando las dos últimas bajadas son muy recientes y no han tenido aún tiempo de ejercer toda su influencia sobre la economía norteamericana. Si la Reserva Federal fuera rigurosa, no debería bajar tipos mañana. Pero, ¿se atreverá la autoridad monetaria norteamericana a contradecir las expectativas y las presiones del mercado? Si lo hiciera, empezaríamos a recuperar la confianza en el rigor y la ortodoxia de los bancos centrales. Sin embargo, dudamos de que la Fed vaya atreverse a llevar la contraria a los mercados. Otra cuestión será ver cómo reaccionan los mercados a lo que decida la Fed mañana. Tampoco parece que haya mucho más que celebrar que lo ya descontado hasta ahora. En definitiva, que necesitamos ver más y mejor para creernos esta perforación de máximos por parte de la bolsa americana, a riesgo de que, en el caso de resultar finalmente fallida, quede en un triple techo, con la consiguiente nueva  reentrada a la baja en el rango de los últimos meses.

Los laboristas británicos dispuestos ahora a apoyar unas elecciones anticipadas en diciembre, pero con condiciones. Los laboristas quieren que ser permita votar a los ciudadanos europeos residentes en el Reino Unido, y que se amplíe la edad legal para votar hasta los 16 años. El gobierno británico ya ha dicho que no convocará elecciones en esas condiciones.

En el terreno macroeconómico, la confianza del consumidor de la Conference Board bajó contra pronóstico en octubre, prolongando de esta manera la tendencia negativa iniciada en el período estival. Por su parte las ventas pendientes de viviendas del mes de septiembre resultaron mejores de lo previsto, pero pese a todo experimentan una ligera desaceleración, en línea con otros datos de vivienda conocidos recientemente en Estados Unidos.

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